Lic. María Carolina Baulo
Historiadora del Arte, Curadora, Escritora
Art Historian, Curator, Writer
SOBRE EL ARTE
El arte es uno de los ejes de mi vida; mi trabajo y mi pasión pasan por ese mismo lugar constantemente. Pero los años me han enseñado que cuanto más me vinculo con la idea de qué es el arte, más dudas y cuestionamientos aparecen en mi cabeza y eso me invita a mantenerme lo más silenciosa posible, leer, escuchar y mirar mucho y siempre opinar con respeto y reservas pero con una voz que tome posición.
Algo de lo que no tengo dudas es que vivir rodeada de arte mejora mi calidad de vida y la del resto de las personas. El arte logra dar con una parte de nuestro ser sobre la cual nos cuesta dar cuenta y maneja códigos que son ajenos a la palabra, por eso muchas veces resulta imposible “entenderlo”, especialmente al referirnos al arte contemporáneo. El arte puede contarnos la historia de un universo, un estado de situación, un aquí y ahora en el tiempo que mantiene lazos firmes con el contexto socio-cultural que lo rodea, pero también puede no ser una herramienta de comunicación y requerir otras estrategias de aproximación que no tengan que ver con la interpretación racional. Estudiar la Historia del Arte con mayúsculas es estudiar la vida de los pueblos, los pensamientos de la gente, el latir de un momento histórico donde las obras aparecen como testigos y ecos- aun cuando no pretendan serlo- de un manifestarse social que los trasciende. Pero también es poner de manifiesto aquello que no está en la superficie, aquellas expresiones artísticas que se ocultan en las sombras y que son tan legítimas, o más, que otras. Siempre digo que, en mi opinión, el arte se justifica, entre otras cosas, por su capacidad para incentivar el pensamiento crítico, generar incomodidad y tensión, sacudir, poner el acento en el lado oscuro de lo obvio; es su irreverencia lo que lo hace libre y poderoso. Y la resiliencia. El arte puede ayudar al hombre a renacer y reconstruir desde los escombros y reinventar el entorno a partir y a pesar suyo, aunque más no sea como testigo visual de su realidad.
ABOUT ART
Art is one of the axes of my life; my work and my passion go through that same place constantly. But the years have taught me that the more I connect with the idea of what art is, more doubts and questions appear in my head and that invites me to stay as silent as possible, read, listen and watch a lot and always give my opinion with respect and reservations but with a voice that takes position.
Something I have no doubt about is that living surrounded by art improves my quality of life and the other people too. Art manages to find a part of ourselves quite difficult for us to have access to and its codes are not the same as words, which is why it is often impossible to "understand" it, especially when referring to contemporary art. Art can tell us the story of a universe, situations about here and now as well as it maintains solid ties with the socio-cultural context that surrounds it, but also, it may not be a communication tool and require other strategies to approach to it, not related with rational interpretation. To study the History of Art with capital letters, is to study people´s lives, their thoughts, the beat of a historical moment where the art works appear as witnesses and echoes - even when they do not pretend to be - of a social manifestation that transcends them. But it is also shows what is not on the surface, those artistic expressions that are hidden in the shadows and that are as legitimate, or more, than others. I always say that, in my opinion, art is justified, among other things, by its ability to encourage critical thinking, generate discomfort and tension, shake, put the accent on the dark side of the obvious; it is its irreverence that makes it free and powerful. And resilience. Art can help man to be reborn and rebuild from the rubble and reinvent his environment in spite of himself, if only as a visual witness of his reality.